martes, 29 de junio de 2010

El aire en movimiento, tiempo


El tiempo es como el viento. Desde que comienza a soplar desgasta las puntas afiladas de las más viejas montañas, crea enormes y pequeñas olas, desarma esas piedras que tanto molestan en nuestra travesía, acarrean lo dulces aromas pero también lo más desagradables, borra las huellas del camino. Lleva a la vida de allí para acá. El tiempo transcurre y cuando deja de soplar deja de ser viento, deja de ser tiempo. Nada. El tiempo como el viento se lleva todo, lo transforma. Provoca todo tipo de cambios; cambios climáticos, cambios geográficos, cambios profundos en nuestro ser. Como no podemos evitar que el viento siga soplando tampoco podemos evitar que el tiempo siga transcurriendo. Sopla y sopla bien fuerte. Nos sube, nos baja, nos hace crecer. Nos lleva de aquí para allá. Pero no somos sólo hojas en el viento.
Somos molinos de tiempo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
contador de visitas
reloj gratis blog y webRelojes para Web
BLOGGERAS.COM